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TRATAMIENTO DEL COLESTEROL CON BIOMAGNETISMO Video sobre el colesterol www.youtube.com/watch ![]() ¿Qué es el colesterol? El colesterol es un esterol (lípido) que se encuentra en los tejidos corporales y en el plasma sanguíneo de los vertebrados, necesario para el correcto funcionamiento del organismo. Los esteroles son un tipo de grasas naturales presentes en el organismo. La mayor parte del colesterol se presenta en el hígado, médula espinal, páncreas y cerebro, aunque también se obtiene a través de algunos alimentos. Pese a que las cifras elevadas de colesterol en sangre tienen consecuencias perjudiciales para la salud, es una sustancia esencial para crear la membrana plasmática que regula la entrada y salida de sustancias en la célula. ¿Qué funciones tiene? · Interviene en la formación de ácidos biliares, vitales para la digestión de las grasas. · Los rayos solares lo transforman en vitamina D para proteger la piel de agentes químicos y evitar la deshidratación. · Precursor de la vitamina D: esencial en el metabolismo del calcio. · Precursor de las hormonas sexuales: progesterona, estrógenos y testosterona. · Precursor de las hormonas corticoesteroidales: cortisol y aldosterona. · Precursor de las sales biliares: esenciales en la absorción de algunos nutrientes lipídicos y vía principal para la excreción de colesterol corporal. · Precursor de las balsas de lípidos. ¿Cuáles son sus fuentes? El origen del colesterol en el organismo tiene dos fuentes, la externa que proviene de la dieta y la interna que produce el propio organismo. Debido a que el organismo puede producir su propio colesterol, existe la posibilidad que personas que no consuman exceso de colesterol, tengan niveles sanguíneos elevados por tener algún desorden genético-metabólico que conlleva a dicha elevación. Los alimentos derivados de animales son ricos en colesterol especialmente huevos, lácteos y las carnes. El organismo absorbe aproximadamente la mitad del colesterol contenido en la dieta. Los esteroles vegetales son escasamente absorbidos por el organismo. El hígado es el principal órgano productor de colesterol (10 % del total), siendo otros órganos importantes en la producción como el intestino, corteza suprarrenal, testículos y ovarios. La síntesis del colesterol se halla regulada sobre todo por la ingesta de colesterol en la dieta. El colesterol por ser una grasa es poco soluble en agua, por lo que si se transportara libre por la sangre sería en forma de gotas de colesterol y se vería en nuestra sangre como gotas de grasa. Pero el caso, es que la naturaleza ha ideado una manera de hacer soluble en agua al colesterol y transportarlo por la sangre y esto es por medio de lipoproteínas. ¿Cuántos tipos de colesterol hay? ![]() Son dos los tipos de lipoproteínas que como partículas unidas al colesterol, ésteres de colesterol, los triglicéridos y fosfolípidos en el torrente sanguíneo son conducidas desde el intestino o el hígado hasta los órganos que lo necesitan. · Lipoproteínas de baja densidad (LDL): Estas se encargan de transportar nuevo colesterol desde el hígado a todas las células de nuestro organismo. Este colesterol es señalado como malo, ya que al unirse a las partículas LDL se depositan en la pared de las arterias y forman las placas de ateroma. · Lipoproteínas de alta densidad (HDL): recogen el colesterol no utilizado y lo devuelven al hígado para su almacenamiento o excreción al exterior a través de la bilis. A este colesterol se le denomina como bueno, pues es al unirse a la partícula HDL es el responsable de tomar el exceso de colesterol de los tejidos y transportarlo de nuevo al hígado para que su destrucción. ¿Por qué es un factor de riesgo? El aumento del LDL-colesterol a nivel sanguíneo lleva a un conjunto de procesos que desembocan en la formación de placas de grasa en las paredes de los vasos sanguíneos, conocidos como ateromas. Estas placas reducen la luz de las arterias y venas, y si una de estas placas se desprende puede producir un infarto agudo al miocardio o en el cerebro un derrame o accidente vascular cerebral. Cuando los niveles en sangre se elevan producen hipercolesterolemia. Está demostrado que las personas con niveles de colesterol en sangre de 240 tienen doble riesgo de sufrir un infarto de miocardio que aquellas con cifras de 200. Si las células son incapaces de absorber todo el colesterol que circula por la sangre, el sobrante se deposita en la pared de la arteria y contribuye a su progresivo estrechamiento originando la arterosclerosis. Supongamos que un enfermo de ateromatosis mantiene muy bajos sus niveles de colesterol en sangre. Es muy probable entonces que éste pueda lograr que ese colesterol pase de la pared arterial nuevamente a la sangre y allí sea eliminado. Por ello, se recomienda a los pacientes que han sufrido infarto de miocardio o accidente cerebral que mantengan cifras muy bajas de colesterol para intentar limpiar así sus arterias. Hipercolesterolemia y dislipemia La hipercolesterolemia se presenta asintomática, así pues su diagnóstico parte de la voluntad del sujeto que decide hacerse un análisis de sangre para determinar su estado de salud con respecto a comprobar sus niveles de colesterol y también de los triglicéridos. Es conveniente que las personas con riesgo de padecer una dislipemia (alteración de los niveles normales de estas grasas), que tengan familiares con cardiopatía isquémica y otras enfermedades cardiovasculares, se sometan a esta prueba desde edades tempranas. La concentración actualmente aceptada como normal de colesterol en el plasma sanguíneo (colesterolemia) de individuos sanos es de 120 a 200 mg/dL. Sin embargo, debe tenerse presente que la concentración total de colesterol plasmático tiene un valor predictivo muy limitado respecto del riesgo cardiovascular global. Cuando esta concentración aumenta se habla de hipercolesterolemia. El principal trastorno que provoca el colesterol en el organismo cuando se encuentra en exceso lo constituye la producción de depósitos de grasas en arterias vitales, causando aterosclerosis, accidente cerebrovascular y enfermedad vascular periférica. El colesterol es también un importante constituyente de los cálculos biliares. Los depósitos de colesterol en las arterias son la principal causa de formación de ateroma (lesión característica de la arteriosclerosis que consiste en el depósito de grasas en la superficie interna de las asterias) y de enfermedades vasculares, entre ellas el infarto agudo al miocardio. Por esto la importancia de determinar en forma precoz los niveles elevados de colesterol en los pacientes. ¿Cuáles son los niveles aceptables de colesterol sanguíneo? La medición de solamente el colesterol total tiene valor limitado. Sin embargo cuando se mide en conjunto con las diferentes lipoproteínas sobre todo el colesterol LDL y el colesterol HDL ofrece un panorama más amplio sobre la probabilidad de producción de ateroma y por lo tanto de riesgo de enfermedades de las arterias coronarias. Los niveles normales en sangre de colesterol varían con la población y suelen aumentar con la edad. Por eso, aunque en grasas sanguíneas se puede hablar de niveles normales es mejor utilizar los niveles recomendables ya que estos sí nos indican riesgo de aterosclerosis. Existen varios tipos de hiperlipidemias (aumento de las grasas del organismo como el colesterol y los triglicéridos) que son importantes de diagnosticar, sobre todo en niños y jóvenes, pues sus niveles de colesterol circulantes son muy altos y por lo tanto los riesgos son elevados, sobre todo en las tipo II y III. Además, existen muchos factores ambientales como: • Edad y sexo. • Antecedentes familiares. • Tabaquismo. • Presencia de hipertensión arterial. • Nivel de colesterol HDL. En personas con riesgo cardiovascular alto, es decir, aquellas con una probabilidad de más de un 20 % de sufrir un evento cardiovascular mayor o letal en un periodo de 10 años, tales como pacientes diabéticos o que previamente hayan tenido uno de estos eventos, la recomendación actual es mantener un nivel de colesterol LDL menor a 100 mg/dL[cita requerida]. Incluso en los pacientes que se catalogan de muy alto riesgo se recomienda un colesterol LDL igual o menor a 70 mg/dL[cita requerida]. En España la máxima concentración recomendada de colesterol en sangre es más elevada que la aceptada internacionalmente y basada en la evidencia científica, como lo indica la Sociedad Española de Arteriosclerosis, quizá debido a que el riesgo cardiovascular global en España es más bajo. Colesterol total (Sociedad Española de Arteriosclerosis)
Colesterol LDL
NOTA: Esta recomendación no significa que la cifra normal de LDL deba rondar los 100 mg/dl. En algunos casos, el nivel deseable de LDL puede ser incluso menor de 70 mg/dl. Colesterol HDL
Riesgo de enfermedad coronaria asociado con los niveles de HDL-Colesterol
Triglicéridos
El Colesterol y los otros factores de riesgo Colesterol y Diabetes. La diabetes (tipo I y tipo II) puede aumentar las cifras de colesterol. De hecho, los niveles de colesterol deseables en los diabéticos son más bajos que en la población general. Colesterol y Obesidad. Los pacientes obesos suelen tener hipertrigliceridemia y un nivel bajo de HDL (colesterol bueno). Bajar de peso produce un aumento de los niveles de HDL, una reducción de los niveles de triglicéridos, mejor tolerancia a la glucosa, disminución de los niveles de insulina y ácido úrico, y descenso de la tensión arterial. Colesterol y Sedentarismo. El ejercicio es una de las recomendaciones generales para el tratamiento y la prevención de la hipercolesterolemia. Entre las consecuencias positivas del ejercicio físico sobre el organismo destaca la mejora de la capacidad pulmonar, del sistema cardiovascular y de los niveles de colesterol y de tensión arterial. Colesterol y Alcohol. El consumo excesivo de alcohol causa hipertrigliceridemia. ![]() Como bajar el colesterol: tratamiento y prevención. La hipercolesterolemia se puede prevenir siguiendo las siguientes recomendaciones:
· Haciendo un programa de ejercicio aeróbico (caminar, carrera suave, ciclismo, natación…), a intensidad moderada (65-70 por ciento de frecuencia cardiaca máxima) y desarrollado de manera regular (tres a cinco sesiones por semana), aumenta el HDL (colesterol bueno) y reduce el LDL (colesterol malo) y los niveles de triglicéridos. Una vez diagnosticada la dislipemia, y si la dieta y el ejercicio físico no consiguen rebajar los niveles por si solos, el médico optará por un tratamiento con fármacos. La elección de los fármacos depende de la anomalía dominante: elevación del LDL (colesterol malo); elevación de los triglicéridos; o niveles elevados en ambos casos. Algunos de los fármacos para pacientes con colesterol elevado son:
Nunca se deben suspender la dieta ni los fármacos hasta que el médico lo indique. Colesterol en los niños Cada vez son más los casos entre niños o jóvenes que debido a una incorrecta dieta y al sedentarismo se convierten en serios candidatos a padecer hipercolesterolemia en el futuro. En líneas generales, éstas deben ser las cifras de colesterol para niños y adolescentes:
Colesterol en la mujer Durante el embarazo. Suele ser normal que la mujer sufra una alteración de los niveles lipídicos en sangre. Las embarazadas deben controlar sus cifras de colesterol y extremar el cuidado si son pacientes con hiperlipidemias previas. Durante la menopausia. Se producen alteraciones en el patrón lipoprotéico relacionado con el descenso de los estrógenos: disminuye el HDL (colesterol bueno) y aumentan el colesterol total y el LDL (colesterol malo). Los médicos recomiendan la terapia hormonal sustitutoria (estrógenos y progesterona) o la terapia hormonal de estrógenos. Ambos tratamientos reducen las molestias habituales de la menopausia y previenen la osteoporosis. Además, en ocasiones, también pueden elevar ligeramente el HDL (colesterol bueno) y reducen el colesterol total. Los triglicéridos En el caso de los triglicéridos no se ha encontrado relación directa como causa de producción de ateroma, pero muchas veces los triglicéridos elevados están acompañadas de colesterol aumentado. Valores elevados de triglicéridos (>400) enmascaran en diferentes grados los valores de los demás lípidos dependiendo de la metodología utilizada siendo poco confiables los valores obtenidos de colesterol y sus fracciones. Por lo general se recomienda tratar la hipertrigliceridemia y cuando se baje a niveles normales verificar los valores de colesterol. También se puede recomendar en pacientes de alto riesgo tratar al paciente como hipercolesterolémico, pues la mayoría de dislipidemias manejan tanto valores elevados de triglicéridos y de colesterol. Además valores muy elevados de triglicéridos pueden producir trastornos serios como una pancreatitis aguda. |